Es una asociación de creyentes que, reunidos en grupos se turnan velando las horas de la noche para adorar a Dios en representación de toda la humanidad y en nombre de toda la Iglesia, para agradecer a Cristo, Dios y Hombre, su presencia en el Sacramento de la Eucaristía
La espiritualidad propia de la Adoración nocturna trata de imitar a Cristo adorador del Padre.
Adorar a Dios es una actividad que compromete vitalmente a todo hombre.
La identidad del Adorador se define por lo que cree, por lo que practica y por los compromisos que asume en el quehacer eclesial.
El Grupo de Adoración nocturna lo formamos unos 40 miembros que nos reunimos los primeros viernes de cada mes de 21:00 a 0:00